En el mes de junio se realizó una jornada organizada por la Secretaría de Producción de la provincia de Córdoba sobre los beneficios y oportunidades del asociativismo para algunos tambos
La figura del tambo asociativo surge como solución para afrontar ciertas dificultades del negocio de la producción láctea como la competitividad, la comercialización, la escala y la continuidad, entre otras. En su trabajo publicado por el INTA*, el Ing. Agr. Alejandro Centeno, explica el asociativismo como una forma diferente de aportar y de administrar los recursos de la empresa para producir leche, y así generar ganancias para los socios participantes. Se entiende por recursos productivos de la empresa a la tierra (campo e instalaciones), el dinero circulante necesario para poner en marcha el proceso, la hacienda (vacas lecheras), la maquinaria y/o servicios que son utilizados durante el proceso, el trabajo (que puede ser operativo o gerencial) y hasta la producción y aporte de alimentos que viene desde otros campos propiedad de los socios y que no intervienen del proyecto en cuestión. El tambo asociativo debe tener como primera meta satisfacer los objetivos de los productores que participen, explica el texto de Centeno, tales como mantener el capital y participar de un negocio competitivo y rentable. El objetivo, continúa el documento, deberá asegurar que el emprendimiento logre escala y eficiencia. Con escala se diluyen los costos de producción, se mejoran los precios de venta, se distribuye mejor el trabajo profesionalizando cada área (tratando de ubicar el mejor en cada puesto), se mejora la gestión de la información y con esto se toman mejores decisiones, se genera más renta, con la posibilidad de reinversión. Y en cuanto a la eficiencia describe que una empresa es eficiente si logra producir una mayor cantidad de productos a menor costo y/o utiliza una menor cantidad de insumos para lograrlo. "Más escala no nos asegura mayor eficiencia, pero sí más eficiencia es el camino para lograr una mayor escala". A. Centeno La figura del asociativismo aparece entonces como una alternativa de hacer negocios. Agrega valor, puede hacer más competitiva la actividad y más atractiva para la generación siguiente, además puede ser un camino posible para los tambos más frágiles, cualquiera sea su tamaño. Es un medio para mejorar la competitividad y sustentabilidad de las empresas tamberas. Es un modelo flexible donde los asociados ponen en común las reglas que los van a regir por los objetivos y el tiempo en el que estipulen. En la reunión se presentó el caso de una cooperativa tambera que se unió a otros para administrar dos tambos, uno de 4.000 litros y otro de 2.500 litros diarios. Son en total 24 socios, tienen un directorio de tres miembros que gestionan la empresa y llevan 11 años en actividad. Lograron mantener el capital y pagar a quienes trabajan y alquileres, pero no han distribuido dividendos. La ventaja que creen ver es que conservan el capital, las vacas o instalaciones que cada uno aportó, más el sentimiento de seguir siendo tamberos. Otro caso interesante es el de cuatro tamberos de la cuenca oeste, de Villegas y Charlone, y su asesor. Se unieron, juntaron vacas y alquilaron un campo en San Luis. En total tienen 550 vacas, liberaron los campos propios que los continúan gestionando los de la generación mayor. Tienen un estatuto para resolver diferendos y están muy motivados. Hay muchas experiencias y modelos de asociación, desde capitalización de vacas como primer eslabón, a otras ingeniosas actitudes de producción o comercialización que pueden extenderse y profundizarse. Las cooperativas que industrializan la leche en el mundo funcionan muy bien y es una manera muy eficiente de defender la producción. En nuestro país esto todavía es un desafío pendiente, el desarrollo empresarial y la actitud de asociación favorecen el crecimiento de esas figuras. Desde CAPROLECOBA y en sintonía con la búsqueda de soluciones para fortalecer la situación de fragilidad de algunos tambos de la cuenca oeste, sea por cuestiones de infraestructura, continuidad o equipo y personal, comercialización, escala y todas las cuestiones que afecten la fortaleza del sistema productivo, se estará desarrollando cerca de fin de año, un taller de reflexión y gestión especialmente enfocado en el asosiativismo. * Centeno; Alejandro, Tambos Asociativos, Interrogantes y reflexiones propias y ajenas. www.inta.gob.ar 10-7-19
